3 de enero de 2015

Más padres dejarán que sus hijas usen vestidos ajustados después de leer esto.

Una chica llamada "Zoe Turner" compró un vestido de 50 dólares, pero no tenía la más mínima idea de lo que pasaría después, cuando la chica estrenó el vestido, fue para ir a una fiesta, se subió a un taxi junto con sus otros amigos hacía el lugar, el vestido la única cosa que la separaría de la muerte.

El taxi iba a terminar en un espantoso accidente, el taxista sufrió una fractura de cuello y sus amigos, aunque salvaron su vida, terminaron con brazos, piernas rotos, perdida de ojos y una fractura de pelvis.
En el caso de Zoe, los doctores afirmaron que su muerte era inevitable si no hubiera sido por el vestido que terminó funcionando como un "corsé", debido a lo apretado que estaba, sus huesos no se rompieron y los mantuvieron en su lugar.

“A pesar de ello no fue fácil”, según Zoe, el resultado final le salvó la vida. Por eso ella se siente afortunada de estar viva. “No podía creer que mi vestido me salvó la vida. Son los mejores 50$ que he gastado”.